18 de abril de 2023
Las relaciones comerciales, el comprar/vender, han estado presentes en nuestra sociedad desde la antigüedad y si ahondamos en el tiempo, con su origen en el trueque una operación “comercial” consistente en intercambiar de mutuo acuerdo bienes de consumo o de cualquier otro tipo. Con la aparición de una herramienta llamada dinero, controlada y garantizada por el poder público, se han facilitado notablemente las operaciones comerciales, pues ahora es el dinero el objeto de trueque universal, ya que permitirá la adquisición de bienes y servicios para los que previamente se habrá fijado un precio, con la ventaja añadida de que se podrán variar fácilmente los precios, por ejemplo, según la oferta y la demanda del mercado.
En la evolución de operaciones comerciales habría que indicar que su ámbito se expande con el sistema de ventas por correo, donde el consumidor hace su compra mediante un impreso generalmente tras consultar un catálogo o revista comercial; recibe la compra en su domicilio y paga mediante el sistema de contrarrembolso. Otro aspecto de expansión del comercio sería el realizado a través de publicidad en televisión, donde existen las populares teletiendas; en este caso se presenta el producto de forma muy vistosa y mediante llamada telefónica puede realizarse la compra. Esto vendría a ser como los antecedentes de lo que a continuación describiremos.
El desarrollo de las tecnologías de la información y comunicación (TIC) sabemos que está modificando de forma notable muchos aspectos en las relaciones sociales. Las operaciones comerciales, están haciendo uso de estas poderosas herramientas y, de hecho, se habla ya claramente del comercio electrónico o si se quiere del e-commerce, de sus numerosos campos y aplicaciones.
Por citar algunos tipos:
Hay que señalar que la coyuntura actual, muy determinada por la pandemia originada por la COVID-19, ha propiciado que se potencie el comercio electrónico en gran medida, debido a la disminución de las actividades “presenciales” y restricciones de movilidad; cabría destacar que se han multiplicado las compras realizadas por internet, en particular de bienes de consumo.
Al hablar de operaciones comerciales que se efectúan a través de internet, hay que destacar que todo el procedimiento (por complejo que pueda parecer) se realiza por esta vía: por ejemplo, desde el momento en que se consulta una página y elegimos un producto para llevarlo a la “cesta”, hacemos el registro para nuestra correcta identificación y procedemos a la realización del pago, se acepta el mismo y se nos confirma el pedido: todo el camino se ha hecho vía telemática.
Hablar de ventajas e inconvenientes del “comercio electrónico” puede resultar algo complejo, pues como es natural no todas las operaciones comerciales son de la misma importancia ni conllevan el mismo riesgo; vamos a señalar algunos aspectos que condicionan para bien o para mal el desarrollo de este tipo de operaciones.
De lo expuesto, se puede concluir que el comercio electrónico ha supuesto un importante avance en la forma de gestionar compras y servicios y al igual que otras transformaciones tecnológicas, “ha venido para quedarse”.
No obstante, hay todavía mucho camino por recorrer, en el sentido de mejorar procedimientos que den garantía y seguridad en las operaciones comerciales y minimicen los riesgos que se derivan de la disponibilidad de datos confidenciales de clientes a disposición de las empresas. Y naturalmente no olvidar los riesgos que origina la ciberdelincuencia y que son comunes a todo tipo de actividad en la red.
Desde TecnoPeritaciones y su equipo de profesionales, ofrecemos a nuestros clientes (tanto empresas como particulares) soporte técnico y la detección de fraudes y ataques cibernéticos ocasionados en sus dispositivos. En esta época navideña que se aproxima, las compras se incrementan y no queremos dejar de recordar pautas básicas a la hora de realizar estas compras:
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